top of page
Ulrich Muchenberger

Ulrich Muchenberger, Basilea, 1951.

En 1994, Ulrich Müchenberger descubrió por primera vez el fenómeno del arte luminoso. Combinaciones sinérgicas de luz y color, cambiantes o quietas, forman la base de sus obras. En 1995, el artista presentó su primer proyecto de luz dinámica. Siguieron muchos otros trabajos en las más diversas escalas: desde proyectos fundamentales de iluminación artística para complejos arquitectónicos (por ejemplo, el Museo Nacional de Copenhague) hasta objetos de iluminación locales expuestos en galerías, incluso en Basilea, la tierra natal del artista. En las obras de Müchenberger, tanto estáticas como dinámicas, siempre hay temas visuales básicos: la interacción entre la luz y la oscuridad en el espacio y los efectos ópticos de las combinaciones de colores.

Las composiciones de luz están encerradas en una forma geométrica estricta, como pinturas ordinarias: cambian sus armonías de color, intensidad y brillo según el programa establecido por el autor. El espectador se sumerge en estas imágenes y paisajes que, respondiendo al mensaje del artista, abren nuestra imaginación. El autor cuenta de su serie: "Al entablar un diálogo con mis obras, la conciencia del espectador genera una respuesta. Ese puente entre la experiencia emocional y su manifestación es el color, es decir, la conexión entre lo interno y lo externo". Así, cada espectador abre su propio mundo visual.

Las transiciones de color en las obras del artista cambian de forma mesurada, con intervalos de tres y cuatro minutos, lo que le permite considerar lentamente todas las transformaciones y combinaciones ópticas. Al visitar la exposición se puede apreciar también la disposición favorable de los objetos luminosos en el interior, que se realza con la atmósfera del estudio "PROSVET".

Ulrich Muchenberger

Ojo a Ojo,

La exposición presenta siete obras de la serie Eye to Eye. Las composiciones luminosas están encerradas en una forma geométrica estricta, como las pinturas ordinarias: cambian sus armonías de color, intensidad y brillo según el programa establecido por el autor. El espectador se sumerge en aquellas imágenes y paisajes que, como respuesta al mensaje del artista, nuestra imaginación nos abre. El autor habla de su serie: “Al entrar en diálogo con mis obras, la conciencia del espectador genera una respuesta. Este puente entre la experiencia emocional y su manifestación es lo que es el color, es decir, la conexión entre el interior y el exterior. Así, cada espectador abre su propio mundo visual.

Ulrich Muchenberger
Ulrich Muchenberger

Ulrich Muchenberger

bottom of page